Alrededor de nueve millones de niños mueren cada año antes de llegar a los cinco años, es decir, casi un niño o una niña cada tres segundos, según el nuevo informe de Save the Children que acompaña a su nueva campaña: "Todos contamos para salvar vidas".
La mayoría de estos niños - el 97 % - pierden la vida en países de ingreso bajo o medio, y en un porcentaje desproporcionado entre las comunidades más pobres y marginadas de esos países. Datos de la Organización Mundial de Salud revelan que en Afganistán, uno/a de cada cinco niños morirá antes de cumplir los cinco años; mientras que en toda la región del África subsahariana esta cifra asciende a uno/a de cada siete.
La infancia es el eje de la campaña lanzada por Save the Children, pero desde la ONG aseguran que también lo es la salud, "el estado nutricional y el bienestar más amplio de un niño o niña pequeño se encuentran inextricablemente unidos al de la madre. Por consiguiente, la campaña incluirá esfuerzos para promover la salud y el bienestar de las madres y acelerar los avances para reducir en tres cuartas partes la mortalidad materna antes del 2015".
La ONG se queja de que "a diferencia de otras enfermedades, como el SIDA, o de problemas nuevos como el cambio climático, la mortalidad neonatal e infantil en los países pobres carece de una base de apoyo social significativa, a nivel tanto público como político".
Respecto a la fecha programada para el cumplimiento de los Objetivos de Desarrollo del Milenio adoptados por la ONU, 2015, la ONG afirmó que "si nos guiamos por las tendencias actuales, estas metas no podrán ser cumplidas".
"El próximo año, el 2010, es por lo tanto absolutamente fundamental para encarrilar al mundo en la senda conducente al cumplimiento de sus promesas a favor de los niños y niñas más pobres del mundo y sus madres", advierte el informe, que además indica que harán falta entre 36 y 45 millones de dólares como fondos adicionales para cumplir los objetivos.