El programa Niños en Movimiento se aplicará en Sevilla a partir de enero en la Clínica de Fátima. El doctor Eugenio Fernández, endocrinólogo infantil del Instituto Hispalense de Pediatría (IHP) es su director, y comenta;
El tratamiento clásico de visita individual al pediatra endocrino que establece una dieta hipocalórica y unas recomendaciones de ejercicio es poco eficaz y en la mayoría de los casos no es capaz de establecer con éxito unos hábitos de vida saludables que perduren.
"El niño obeso hoy es un potencial enfermo mañana que va a tener una mala calidad de vida y va a consumir importantes recursos sanitarios y sociales. Por ello, es imprescindible establecer estrategias eficaces y coordinadas para hacer frente al problema desde las instituciones públicas, los colegios, las familias y el personal sanitario".
Niños en Movimiento, es un programa de tratamiento grupal diseñado en la Unidad de Endocrinología Infantil del Hospital Vall d´Hebrón de Barcelona, cuyo éxito depende en gran medida de la implicación de la familia y del niño".
Barcelona, Córdoba, Aviles o Tarragona son algunas de las ciudades que ya han puesto en marcha este tratamiento y han comprobado como hasta el 90% de los casos tratados han disminuido su índice de masa corporal.
En Andalucía, según el Observatorio de la Nutrición infantil, más de 425.000 niños entre uno y diez años comen mal y un 4% de ellos padece sobrepeso.
Los tres puntos en los que se apoya Niños en Movimiento son la promoción de una alimentación sana y un ejercicio físico adecuado, así como una especial atención a los aspectos psicológicos y emocionales.
Entre los objetivos el doctor Fernández subraya promover la actividad física, poner especial énfasis en el aumento de la autoestima y las relaciones sociales, promocionar una alimentación normocalórica y equilibrada y establecer estilos de vida saludables tanto del niño como de su entorno familiar.
No obstante, advierte que "el verdadero fin es inculcar al paciente y a su entorno unos hábitos de vida saludables y ayudarles a identificar los motivos por los que hasta ese momento no lo habían conseguido".
La unidad de endocrinología pediátrica del IHP ofrecerá dicho tratamiento, dirigido a niños entre siete y doce años, a partir de enero.
Se formarán grupos de entre cinco y diez pacientes y tendrá una duración de once semanas ininterrumpidas, con una sesión semanal de una hora y media. "En principio se habilitarán dos salas para diferenciar el grupo de los padres y el de los pacientes. Ambos serán atendidos por un grupo multidisciplinar formado por un endocrino infantil, un psicólogo y un nutricionista".