Se observó a un grupo de personas representativas de la población de E.E.U.U y encontraron una relación muy intensa entre los factores de riesgo cardiovascular y la cantidad de azúcar que la gente consume.
El estudio, que se basa en entrevistas y medidas de 6,113 adultos del Estudio nacional de examen de salud y nutrición de 1999 a 2006, encontró un aumento significativo en el consumo de azúcar, de 10.6 por ciento de las calorías diarias entre 1977 y 1978, a 15.8 por ciento actualmente.
El adulto estadounidense promedio consume unos 91 gramos (3.2 onzas) de azúcar al día, el equivalente a 21.4 cucharaditas, o 359 calorías, encontró el estudio.
Alrededor de la mitad del azúcar se encuentra en los refrescos, pero "está en todas partes, en los cereales, en los alimentos horneados y más".
Cuando los fabricantes reducen el contenido de grasa de la comida, con frecuencia añaden azúcar para mejorar el sabor.
Un mayor consumo de azúcar también se relacionó con mayores niveles de triglicéridos, y se observó una relación entre el consumo de azúcar y niveles del peligroso colesterol LDL entre las mujeres, pero no entre los hombres.
Las personas del estudio que obtenían 25% o más de sus calorías del azúcar reportaron haber aumentado un promedio de 1.27 kilos ( 2.8 libras) en el año anterior, mientras que aquellos cuya ingesta de azúcar conformaba menos del 5% reportaron una pérdida de peso de alrededor de 0.15 kilos (un tercio de libra).
Rachel K. Johnson, profesora de nutrición de la Universidad de Vermont y autora principal de una declaración científica de 2009 sobre el tema, explicó;
"Ahora tenemos evidencia a partir de una gran encuesta nacional de que la ingesta de azúcar añadida se asocia con los factores de riesgo de la enfermedad cardíaca".