Toman pocos cereales, legumbres, frutas y verduras y, en concreto, comen poco pan.
Los niños que consumen más pan tienen menos sobrepeso y obesidad y mejores parámetros sanguíneos y de otros nutrientes. Son algunas de las conclusiones que se desprenden de un estudio dirigido por Rosa María Ortega, catedrática de Nutrición de la Universidad Complutense de Madrid.
En el trabajo de investigación han participado 504 escolares, de entre 8 y 13 años, de 10 colegios públicos de A Coruña, Barcelona, Madrid, Sevilla, y Valencia, en el que se analizaron los datos dietéticos, de actividad física, antropométricos, bioquímicos, y socio-sanitarios.
Los investigadores evaluaron la situación inicial de los niños, la diferencia entre los que tomaban más de 80 gramos de pan al día y menos. Después, se hizo un supuesto teórico en el que se añadían dos raciones más de pan para ver cómo influía en la dieta.
Se observó que los niños que comían más de 80 gramos de pan al día padecían menos sobrepeso (15,8%) y obesidad (13,9%) frente a los que tomaban menos (16,6% y 20,5%, respectivamente).
Además, registraban un menor índice de masa corporal, mejores parámetros sanguíneos de riesgo cardiovascular y de control de glucemia, además de un perfil calórico más correcto.
"El pan se asocia al peso y se piensa que para adelgazar lo mejor es eliminarlo de la dieta. Los datos contradicen eso, puesto que los niños que comen más pan son los más delgados y los que tienen una dieta más equilibrada".
"Un alimento por sí solo no adelgaza ni engorda, salvo en el sentido de sustituir un alimento por otros más calóricos. Lo que importa es que la dieta sea equilibrada", recuerda la catedrática.
Los niños españoles no llevan una dieta correcta.
El estudio, ha sido promovido por la campaña Pan Cada Día, una iniciativa del sector del pan español, y revela que el 18,6% de los escolares lleva dietas inadecuadas y el 31,7% desequilibradas.
