miércoles, 14 de julio de 2010

UN PROGRAMA ENSEÑA A LOS PADRES CÓMO ALIMENTAR A SUS HIJOS DE FORMA SALUDABLE

Un estudio sugiere que las primeras prácticas alimenticias, cumplen una función crítica en los patrones de alimentación de los hijos.

Enseñar a las madres primerizas a alimentar a sus bebés "de manera responsable" implica que los bebés sean más propensos a adoptar una alimentación sana, lo que reduce su riesgo de obesidad, así lo confirman investigadores de EE. UU.



Para el estudio, las enfermeras visitaron a las mamás primerizas en sus casas y les enseñaron;

  • sobre el momento y los métodos para introducir alimentos sólidos a los bebés
  • cómo utilizar la exposición repetida para mejorar el gusto del bebé para que acepte nuevos alimentos como las verduras
  • cómo reconocer las señales que indican que el niño tiene hambre o está lleno.

Los bebés de las madres que participaron en el programa de 1 año de duración, eran más propensos a aceptar las verduras y los nuevos tipos de alimentos.


"Estos resultados proporcionan la primera evidencia de que enseñar a los padres cómo, qué y cuándo alimentar a sus hijos puede promover hábitos alimenticios saludable", señaló la investigadora principal, Jennifer Savage, del Centro de Investigación de la Obesidad Infantil de la Universidad Estatal de Pensilvania.


El programa educativo para madres primerizas también mejoró los patrones de crecimiento entre los bebés.


"Debido a que las decisiones y prácticas tempranas de alimentación desempeñan un papel fundamental en el desarrollo de las preferencias alimenticias y el consumo de los niños, este programa de intervención se centra en enseñar a los padres cómo responder de manera sensible y apropiada a las señales de hambre y saciedad de su hijo, a permitir que los lactantes y los niños pequeños decidan cuánto comer, al mismo tiempo que les proporciona información sobre cómo, qué y cuándo introducir alimentos sólidos para promover la aceptación de nuevos alimentos".