Un grupo de expertos de la Universidad de Harvard liderado
por Walter Willett, profesor de nutrición de la misma, presenta un icono 'plato',
basado en una investigación actualizada, sin intereses de la industria ni presiones
políticas y, además, con recomendaciones específicas y precisas.
Clotilde Vázquez, jefa del servicio de Nutrición del
Hospital Ramón y Cajal de Madrid afirma, que este nuevo icono del Reino Unido, es
mucho más
informativo e intuitivo en cuanto a las proporciones de los
alimentos, que la guía de alimentación que sacó los EEUU hace un año llamado,
'My Plate'.
Esta nueva guía de Harvard, 'Healthy Eating Plate', aconseja
elegir los granos enteros y limitar los refinados, ya que, con el tiempo,
"un elevado consumo de los primeros puede aumentar el riesgo de enfermedad
cardiaca y diabetes de tipo 2".
Este nuevo programa hace una división de los alimentos en
4 grupos:
Los cereales, las proteínas, las frutas y las verduras,
pero son muy distintos en sus recomendaciones.
'Healthy Eating Plate' anima a escoger el pescado y
recomienda limitar el consumo de la carne roja y poco hecha.
"Estos alimentos incrementan el riesgo de problemas
cardiacos, diabetes y cáncer de colon".
El esquema de Harvard recalca lo importante que resulta
ingerir una amplia variedad de verduras, pero con un matiz: las patatas deben
consumirse con menor frecuencia, ya que "están llenas de almidón y, por lo
tanto, tienen el mismo efecto que los cereales de grano refinado y los
caramelos.
'Healthy Eating Plate' propone
"comer todo tipo de
frutas"
Los expertos de Harvard animan a usar más los aceites (como
el de oliva) para cocinar, en ensalada y la mesa, ya que "ayuda a reducir
el colesterol malo y es beneficioso para el corazón".
"Se
debe limitar la mantequilla y las grasas trans".
Respecto a la leche, consideran que es suficiente con 1 o
2 porciones diarias.
Además, recomiendan beber agua, té o café (con poco o
nada de azúcar) y sugiere evitar las bebidas azucaradas, ya que
"contribuyen al desarrollo de diabetes y obesidad".
También se incluye un
elemento diferenciador más:
la actividad física.
"Es la mitad del secreto para controlar el peso.
La
otra mitad depende de una dieta saludable, con porciones modestas y con las
calorías que cada uno necesita.