En los últimos 50 años se ha incrementado
el consumo de carne, huevos, productos lácteos, azúcar refinado y bollería
industrial y se ha reducido la ingesta de pescado azul, cereales, legumbres, tubérculos,
frutas y verduras. Todo esto y unido a la disminución de la actividad física, está claramente relacionado con le incremento de enfermedades crónicas que hoy
en día nos acompañan.
En la Encuesta Nacional
de Salud del año 2012 en España, se deja claro que el 37% de la población mayor
de 18 años sufre de Sobrepeso y el 17% de Obesidad.
Desde hace tiempo se observa que las
personas que siguen Dietas Vegetarianas presentan menor IMC (Índice de Masa
Corporal) frente a las personas que no los son, con el menor riesgo de padecer
enfermedades relacionadas con la mala Alimentación.
Existen diferentes tipos de Dietas
Vegetarianas; Vegaza, Ovo-vegetariana, Lacto-vegetariana. Ovo-Lácteo-Vegetariana
Este tipo de alimentación presenta un
consumo considerable y como base de frutas y verduras, siendo los cereales
integrales y tubérculos la fuente principal de Hidratos de Carbono de absorción
lenta.
En menor medida se incluyen los frutos secos como fuente de proteínas y
ocasionalmente en forma los lácteos en forma de yogur. La grasa que se emplea
es el aceite de oliva virgen extra, junto a aceitunas y aguacates.
El presente estudio se llevó a cabo
mediante un ensayo de campo con intervención nutricional estricta en régimen de
pensión completa y pernocta, durante 15 días en una casa de reposo en Castellón
(España).
Fueron un total de 168 personas entre
hombre y mujeres, en los que al inicio se recogieron datos a través de un
cuestionario de Frecuencia de Consumo de Alimentos (CFCA) y se comprobó que el
consumo basal de grasa total en la dieta habitual fuese superior al 30% de la Kcal. Diarias.
Se obtuvieron datos basales y tras dos
semanas de la intervención de antropometría y composición corporal.
- Se midió diariamente la tensión arterial y la frecuencia cardiaca.
- Todas las medidas antropométricas y de composición corporal fueron realizadas a primera hora de la mañana.
- Se estableció una Dieta de 1900 Kcal/día para ambos sexos, con un reparto en nutrientes del 15% en proteínas, un 65% de Hidratos de Carbono y un 20% de grasa.
- Esto hacía que tuviesen una disminución respecto a la ingesta habitual de grasa total y un incremento de loa Hidratos de Carbono, principalmente complejos.
- Las técnicas de cocción de alimentos empleadas fueron al vapor, hervido o al horno, sin emplear aceite durante el cocinado.
- No se añadía sal a los alimentos, ni se tomaba azúcar, miel, melaza, ni edulcorantes artificiales.
- Se permitió el uso de hierbas aromáticas como el tomillo, orégano o el romero. Tampoco se bebió café. Té, refrescos ni alcohol.
Tras las dos semanas de la intervención se
observo una perdida de peso cercana a los 2 Kg ., con su reducción paralela en el IMC, el
perímetro de la cintura, el perímetro de la cadera y el ICC
Tras el seguimiento de la DIETA Vegetariana que se
estableció, todos los participantes tuvieron un descenso significativo de peso,
con una reducción del 3% respecto al peso inicial.
También se produjo una disminución de 2,90 cm . en al media del
perímetro de la cintura, acompañado de una reducción de 2,04 cm . en el perímetro de
la cadera, así como 0,14 Kg .
de la masa grasa.
Todos estos resultados entran dentro de las
recomendaciones actuales para la perdido de peso saludable, que se estableció hace años entre 0,5 y 1 Kg .
a la semana.
La modalidad de Dieta Vegetariana empleada
en esta intervención dietética ha conseguido una reducción de peso con
disminución del compartimiento graso corporal.
A pesar de tratarse de una Dieta hipocalórica,
no presentó efecto cetogenico y resultó saciante, por su riqueza en alimentos
de origen vegetal y fibra. Su composición nutricional no presentaba carencias a
corto plazo, ni riesgos para la salud.
Gracias a la riqueza en Hidratos de Carbono
de absorción lenta incluidos en la dieta, se pudo mantener la practica de
ejercicio habitual de los participantes, tal y como se recomienda en todos los
programas de perdida de peso, para conservar la masa muscular.
En resumen, podemos determinar con este
estudio y otros muchos anteriores, que este tipo de Dieta vegetariana es
conveniente para la recomendación en
estrategias y programas de perdida de peso a corto plazo y sobre todo para la
adquisición de hábitos alimentarios saludables.